Empresario de la construcción irá a juicio por evasión con facturas truchas
El titular de Apicons Elaborados S.A., Carlos Castro Blanco, fue acusado por el fiscal federal Fernando Gélvez como autor de evasión agravada de casi 9 millones de pesos en concepto de IVA. Utilizó facturación falsa entre 2015 y 2017 para ocultar su verdadera situación fiscal
La Justicia Federal de Rawson resolvió elevar a juicio la causa contra Carlos Castro Blanco, presidente de la empresa Apicons Elaborados S.A., acusado de evadir casi 9 millones de pesos en concepto de IVA entre los años 2015 y 2017. El caso fue impulsado por el fiscal federal Fernando Gélvez, quien lo consideró autor material y penalmente responsable del delito de evasión agravada de tributos.
Según la acusación, Castro Blanco implementó un sistema de facturación apócrifa y declaraciones juradas falsas para evitar el pago de sus obligaciones fiscales. Las maniobras incluyeron el uso de proveedores inexistentes o sin capacidad económica y la emisión de notas de crédito injustificadas que no fueron reconocidas por los organismos contratantes.
El Juzgado Federal N°2, a cargo del juez Guillermo Lleral, rechazó el planteo de nulidad de la defensa, que intentó justificar la cancelación de la deuda. El magistrado resolvió la clausura de la instrucción y la elevación de la causa a juicio oral ante el Tribunal Oral en lo Criminal Federal de Comodoro Rivadavia.
De acuerdo a la fiscalía, el empresario evadió $2,1 millones en 2015, $4,3 millones en 2016 y $2,3 millones en 2017, sumando $8.800.569,37. Además, el informe pericial contable que sustenta la acusación fue clave para confirmar las inconsistencias y falsedades.
Uno de los mecanismos detectados fue el uso de la firma Apimir S.A., también presidida por Castro Blanco, que figuraba en la Base eApoc (registro de contribuyentes que emiten facturas truchas), y que no tenía capacidad económica para prestar servicios.
También se comprobó la inclusión de comprobantes emitidos a otras empresas, como Petroquímica Comodoro Rivadavia, cuyas facturas aparecieron computadas por Apicons sin haber sido emitidas a su nombre. Incluso se detectaron comprobantes por servicios turísticos en el exterior o transportes no vinculados a la actividad, usados para deducir créditos fiscales inexistentes.
El caso se inició por una denuncia de la ex AFIP, hoy Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA), e incluye documentos clave provistos por la Inspección General de Justicia del Chubut, la Dirección de Vialidad Provincial y la Municipalidad de Trelew, que confirmaron que las obras fueron pagadas y que no correspondían las notas de crédito emitidas por el empresario.
Castro Blanco podría recibir una condena de prisión efectiva si se confirma su culpabilidad en juicio, debido al monto evadido y la gravedad de las maniobras.