5 de febrero de 2025
MAR DE FONDO
Chubut y Santa Cruz tironean por la veda de langostino en el Golfo San Jorge
Con la siguiente reunión del Consejo Federal Pesquero en el horizonte, ambas provincias muestran una discrepancia notable sobre la prohibición de captura de Pleoticus muelleri en la región

Las provincias de Chubut y Santa Cruz atraviesan un nuevo desacuerdo en materia pesquera, con el Golfo San Jorge como epicentro de una disputa sobre la gestión del recurso maritimo. Mientras Chubut ratifica su compromiso de mantener la veda para la pesca del langostino, Santa Cruz impulsa una prospección en la misma área, lo que podría generar tensiones en la próxima reunión del Consejo Federal Pesquero.
Desde la Secretaría de Pesca de Chubut, se emitió una nota oficial dirigida al Consejo Federal Pesquero en la que se reafirma la decisión de mantener vedada la pesca de langostino (Pleoticus muelleri) en aguas provinciales del Golfo San Jorge. El documento destaca que los datos científicos disponibles demuestran que las tallas de la especie en la zona no son biológicamente sustentables ni comercialmente viables, y subraya que la veda permitió un incremento sostenido de la biomasa disponible.
El gobernador Ignacio Torres también se pronunció a favor de la continuidad del acuerdo firmado en 2018, que establece una compensación de 3.800 toneladas de langostino por mantener el cierre de la pesquería.
En contraste, trascendió que el Gobierno de Santa Cruz, a través del subsecretario de Pesca, Fernando Marcos, llevaría al Consejo Federal Pesquero una agenda que prioriza la defensa de su cuota de merluza y la posibilidad de abrir el Golfo San Jorge para una prospección que permita negociar una descarga de 30.000 toneladas de langostino en aguas nacionales.
El funcionario destacó la importancia de fortalecer la sostenibilidad del sector y garantizar el empleo, argumentando que el primer relevamiento pesquero propio realizado por la provincia, que se extenderá hasta el mes de marzo, proporcionará información clave para una administración más eficiente de los recursos.
Sin embargo, los primeros resultados corroborarían lo advertido de Chubut, sobre la presencia de un langostino todavía en una etapa inviablemente comerciable. “Es una lástima hacer más lances, porque son todos iguales. Hay marca, pero todo langostino juvenil”, contaron los trabajadores marítimos al sitio especializado Pescare, a lo que calificaron el ejercicio como “un verdadero desastre”.
El acuerdo original para el manejo de la pesquería de langostino, rubricado durante la gestión de Juan Manuel Bosch, establecía una veda permanente de cinco años, renovable anualmente, en el espejo de agua compartido por ambas provincias. Sin embargo, la propuesta de Santa Cruz de modificar esta política llamó fuertemente la atención en Chubut, que considera que abrir la zona podría afectar negativamente la sustentabilidad del recurso y el equilibrio económico alcanzado en los últimos años.