La Tecla Patagonia
Todos los derechos reservados
A mediados de mayo Unter Río Negro dispuso suspender las clases presenciales en toda la provincia por 72 horas ante la situación sanitaria de la provincia y protagonizó fuertes cruces con el Gobierno. En ese momento, en Bariloche ya estaba suspendida la presencialidad, una medida que en la cordillera se aplicó desde el 30 de abril hasta el 31 de mayo cuando retornaron en primaria, inicial y especial.
Para ello, según analizaron post plenario virtual, evalúan la posibilidad de realizar un paro de 24 horas para ver cuál es la reacción de Provincia, con la posibilidad de extender la medida por 48 horas más si desde el gobierno de Arabela Carreras no hay respuestas positivas a su reclamo.
Desde el gremio no comprenden la presencialidad y argumentan un riesgo innecesario mantener la circulación de más de 34 mil estudiantes cuando hay un sistema de clases virtuales que se encuentra aceitado gracias a las medidas tomadas por Educación y Salud.
Cabe destacar que la propia Arabela había decidido frenar la virtualidad a mediados de mayo debido a la difícil situación sanitaria que atravesaba la localidad. Pero cuando a fines de ese mismo mes decidió retomar la virtualidad, desde Unter le soltaron la mano.
A esta solicitud, se suma el pedido de vacunación a docentes para continuar sin riesgo la presencialidad, además, claro, del histórico reclamo salarial que vienen manteniendo desde fines del año pasado.