18 de agosto de 2025
ENERGIA
Avanza el puerto petrolero en Punta Colorada: ya se completaron el 10% de las obras
La terminal de exportación en Río Negro, clave para la salida al Atlántico del crudo neuquino de Vaca Muerta, ya muestra sus primeros tanques de gran escala. El proyecto promete transformar la logística energética del país y convertir a la provincia en un nodo estratégico para la macroeconomía nacional

El puerto petrolero del Oleoducto Vaca Muerta Sur (VMOS) en Punta Colorada, a 30 kilómetros de Sierra Grande, avanza a paso firme y ya cuenta con el 10% del paquete de obras finalizado. Se trata de uno de los proyectos de infraestructura energética más ambiciosos de las últimas décadas en Argentina, diseñado para resolver el cuello de botella en la exportación del crudo neuquino y posicionar a Río Negro como punto neurálgico en la logística hidrocarburífera.
En el corazón del complejo ya se levantan los primeros tanques gigantes de almacenamiento. Son cinco, con posibilidad de sumar un sexto, y cada uno tendrá capacidad para 120.000 metros cúbicos, una magnitud comparable al tamaño de la cancha de River Plate. Las tareas actuales incluyen excavaciones, fundaciones y soldaduras de piso, a cargo de la compañía nacional Milicic y de CB&I, una de las principales constructoras de tanques del mundo.
En paralelo, avanza la construcción del Oleoducto Vaca Muerta Sur, que transportará el petróleo a lo largo de 437 kilómetros desde la cuenca neuquina hasta la costa atlántica. El primer tramo, entre Allen y Chelforó, ya está concluido, mientras que en la zona sur del río Negro continúan los trabajos de soldadura de caños. Este ducto, junto con el puerto, será el sistema que permitirá a Argentina multiplicar sus exportaciones de petróleo en los próximos años.
El proyecto cuenta con un financiamiento de más de 2.000 millones de dólares, aportados por capitales nacionales e internacionales. Según las estimaciones oficiales, la terminal entrará en funcionamiento hacia fines de 2026 con una capacidad inicial de 180.000 barriles diarios, y alcanzará los 550.000 barriles diarios en 2027, cuando opere a pleno. Se prevé además la instalación de dos estaciones de bombeo y de dos monoboyas a ocho kilómetros de la costa, que permitirán operar con buques VLCC, los más grandes del mundo, capaces de transportar hasta dos millones de barriles de crudo.
La magnitud de la obra demanda logística internacional. En los próximos meses llegarán al puerto de San Antonio Este cuatro barcos con el acero necesario para completar los tanques, mientras que antes de fin de año arribarán los caños destinados a la conexión en Fuerte Argentino, al sur de Las Grutas, donde se articulará el proyecto Argentina LNG liderado por Pan American Energy, YPF y Golar LNG.
El impacto económico y laboral ya comienza a sentirse en la región. En Sierra Grande, San Antonio Oeste y localidades aledañas se registra un incremento en la demanda de mano de obra, insumos y servicios vinculados al proyecto. La construcción generará 1.500 empleos directos y cerca de 4.000 indirectos, lo que representa un impulso significativo para las economías locales.
Sin embargo, no todo es consenso. Organizaciones ambientalistas y sectores de la comunidad expresaron preocupación por los riesgos asociados a la operación de un puerto petrolero de aguas profundas y por los potenciales impactos sobre el ecosistema marino. Desde el consorcio VMOS aseguran que la terminal contará con estándares internacionales de seguridad y protocolos de respuesta rápida ante contingencias ambientales.