La economía argentina-fuertemente sacudida por el aislamiento y la pandemia-empieza a mostrar, paulatinamente, una recuperación en el territorio. Esto se puede observar, por ejemplo, en el aumento del 5,2% de las transferencias por coparticipación del Estado Nacional a las distintas provincias. Estos números fueron presentados por el Centro de Economía Popular Argentina (CEPA), que además, explicaron que dichas transferencias representan una buena parte de los ingresos provinciales: "en promedio, alcanzan el 71,3 por ciento del total”. El porcentaje restante se corresponde a Ingresos Brutos, Inmobiliarios, Automotor y Sellos. Esto se traduce, en un país de clave federal, en una gran dependencia de las provincias a la capital financiera del país, teniendo en cuenta el alto porcentaje de recursos provinciales que significa la coparticipación para las provincias. En lo que respecta a las provincias de la región patagónica, el ingreso de los recursos de coparticipación significan, en el caso de Neuquén, un 42% de los recursos totales de la provincia. En tanto un 67% para Santa Cruz y un 70% para Río Negro. Según el informe, “al considerar la situación provincia por provincia, es posible distinguir que la pérdida en términos reales de las transferencias por Coparticipación tiene en sus extremos a CABA, con una caída de 54,8% interanual -como resultado de la reducción de las transferencias vinculadas al costo de la policía y bomberos- y a Santa Fe que recupera un 11,3%. Se trata de un escenario donde, salvo CABA, el resto de las provincias le ganan a la recaudación del año anterior ajustada por inflación por noveno mes consecutivo. |