La aparente lista de “unidad” lograda por los históricos del justicialismo chubutense comienza a mostrar grietas. La historia es conocida, se promete una apertura que después en los papales no se cumple porque la lapicera la siguen manejando los mismos. Las miradas están puestas sobre la figura de José Arrechea, un histórico del peronismo del Valle al que nadie le niega su sentido de pertenencia y militancia, pero cuyos logros en las urnas han sido realmente escasos.
En las conversaciones previas al cierre de listas, que quedarán oficializadas el próximo domingo, desde la conducción del peronismo se pidió apertura, diálogo y serenidad. De esta forma en las diversas localidades donde hay divisiones se solicitó que se juntaran los referentes de peso para armar listas de consensos.
Pero además, los dos candidatos del peronismo que compitieron en las PASO en las elecciones pasadas, Gustavo Mac Karthy y Carlos Linares, pedían tener representación en las nóminas, no solamente en sus lugares de origen sino en el interior provincial donde ambos armaron estructuras con bases de militantes, que en definitiva fueron los que trabajaron en las PASO y luego en las generales para apoyar a Linares.
Los enojos y las grietas vienen por ahí. El sector de Mac Karthy no quedó conforme con los lugares otorgados. Buscaba poder contener a varios compañeros del interior que trabajaron muy fuerte en las elecciones pasadas y que ahora quedaron afuera de todo el armado. Mac Karthy hizo una muy buena elección en el interior, lo que inclinó la balanza a favor de Linares en las PASO pasadas, fueron los votos de Comodoro. Además, su esposa, Florencia Papaiani, fue la revelación de las elecciones en Trelew, pisándole los talones al jefe comunal, Adrián Maderna.
Al parecer, Arrechea, se sentó en la silla de “armador” con el aval de Linares y parte de los históricos como Norberto Yauhar; Carlos Eliceche, Ricardo Mutio, actual presidente del PJ. Desde allí, repartió cargos, incluso puso a varios suyos, lo que generó enojo en el Frente Peronista que semanas atrás había accedido a sentarse con Adrián Maderna, para cerrar filas en Trelew.
“Lo dejan hacer como si fuera el único que puede armar en la provincia. Arma desde la sombras, un tipo de 75 años que salió cuarto de cinco candidatos y noveno en las generales. No se planteó un esquema parejo que refleje algo del resultado obtenido en las urnas el año pasado”, indicaron a La Tecla Patagonia con enojo, desde el Frente Peronista.
El cierre de listas del peronismo seguirá trayendo cola, con un Linares ya lanzado a las Legislativas pero con apoyo fragmentado, se abre un escenario que resulta conocido para la dirigencia chubentense. ¿Lograrán superarlo? |