11 de diciembre de 2025
RIO NEGRO
Fuerte cruce en la Legislatura por el rol de Mekorot en la planificación hídrica
Magdalena Odarda cuestionó la presencia de la empresa israelí en la comisión legislativa y advirtió que la provincia no puede delegar funciones estratégicas ni restringir el acceso ciudadano al debate

La presencia de la empresa estatal israelí Mekorot en una reunión de la Comisión de Planificación Hídrica de Río Negro derivó en un fuerte encontronazo político. La diputada provincial Magdalena Odarda protagonizó un intercambio tenso con los representantes de la firma, mientras parte del oficialismo optó por respaldarlos públicamente durante el encuentro, lo que elevó el clima de discusión.
Odarda objetó desde el inicio que la provincia delegue la planificación de los recursos hídricos en una empresa extranjera, remarcando que esa función corresponde por ley al Departamento Provincial de Aguas. Según planteó, los estudios y diagnósticos sobre el sistema hídrico constituyen información estratégica que debe permanecer bajo control estatal, con participación de instituciones como universidades nacionales y organismos científicos.
La legisladora también expresó su malestar por las condiciones en que se realizó la reunión, que fue cerrada al público y sin participación remota. El encuentro coincidió con la conmemoración del Día de los Derechos Humanos, lo que a juicio de la diputada contrastó con la decisión de no permitir la presencia de vecinos ni la intervención ciudadana. Por eso llevó al recinto inquietudes y preguntas que, afirmó, habían quedado sin canal institucional para ser formuladas.
El cuestionamiento incluyó referencias a informes de Naciones Unidas sobre el accionar del Estado de Israel y su impacto en materia de derechos humanos, documentación que para la legisladora debe ser considerada cuando se evalúa la participación de organismos o empresas de ese país en la gestión de bienes sensibles como el agua. A su entender, estos antecedentes deben ser parte del análisis institucional antes de cerrar convenios.
En el plano local, Odarda sostuvo que el acuerdo firmado con Mekorot debió pasar obligatoriamente por la Legislatura, al tratarse de un convenio con una empresa estatal extranjera. Para la diputada, el procedimiento utilizado eludió la obligación constitucional de control parlamentario y dejó al margen las herramientas de transparencia que establece el marco ambiental vigente.
También advirtió sobre la falta de publicación del contrato, la ausencia de una audiencia pública y la no intervención de fiscalías ambientales, lo que consideró violatorio de compromisos asumidos por el país en normas como el Acuerdo de Escazú y la Ley General del Ambiente. A su juicio, la provincia no puede avanzar en políticas hídricas sin asegurar previamente mecanismos de participación y acceso a la información.
El episodio volvió a exponer la controversia que genera la intervención de Mekorot en Río Negro, en un contexto donde organizaciones sociales y sectores políticos cuestionan las condiciones del acuerdo y el nivel de injerencia que la empresa tendrá en el diseño de las políticas hídricas. Para Odarda, la defensa del agua como bien común exige consolidar la capacidad técnica del Estado y evitar cualquier proceso que pueda interpretarse como una cesión de atribuciones centrales.
La legisladora cerró su intervención señalando que la planificación hídrica debe sostenerse sobre transparencia, control democrático y participación ciudadana, y que estos principios no pueden verse condicionados por intereses empresariales externos ni por procedimientos legislativos restringidos. La discusión quedó abierta en el recinto, anticipando nuevos debates antes de que avance cualquier definición institucional sobre el rol de Mekorot en la provincia.