19 de septiembre de 2025
CHUBUT
Torres ejecutó la desvinculación de una ex ministra condenada por corrupción
La ex funcionaria Cecilia Torres Otarola, protagonista de la causa “Ñoquis Calientes”, fue expulsada de la administración pública por decreto del Gobernador. La medida busca reafirmar la línea de transparencia y la aplicación de la “tolerancia cero” a los condenados por delitos contra el Estado

El gobernador del Chubut, Ignacio “Nacho” Torres, firmó el decreto mediante el cual se dispuso la expulsión de la administración pública de Cecilia Torres Otarola, ex ministra de Familia y Desarrollo Social durante la gestión de Mariano Arcioni. La ex funcionaria fue condenada por corrupción en el marco de la causa judicial “Ñoquis Calientes”.
La decisión se enmarca en la política de transparencia que la actual gestión promueve desde el inicio del mandato. “Como dijimos desde el primer día de gobierno, no vamos a permitir que ningún condenado por corrupción sea parte del Estado", sostuvo Torres. “Esta medida no es solo un acto de Justicia, sino una deuda saldada con los principales perjudicados por su accionar: todos los chubutenses”.
El decreto, refrendado también por el ministro de Gobierno, Victoriano Eraso Parodi, se fundamenta en el artículo 17 inciso g) del Convenio Colectivo de Salud y en los artículos 51 incisos 1° y 2° de la Ley I N° 74, a partir de lo resuelto en el sumario administrativo instruido tras la condena penal.
El documento subraya que “todo funcionario público debe tener idoneidad técnica y moral para el ejercicio de la función pública” y que los hechos comprobados “dañan gravemente la imagen del Estado provincial y del sistema de salud pública en particular”.
Torres Otarola fue condenada a 2 años y 8 meses de prisión en suspenso e inhabilitación especial perpetua para ejercer cargos públicos, tras ser hallada penalmente responsable de defraudación a la administración pública y exacciones ilegales.
La investigación judicial comprobó que, durante su paso por el Ministerio, se contrató personal que percibía haberes estatales sin desempeñar funciones en el área, derivando recursos a tareas ajenas a la administración provincial.
El caso, conocido como “Ñoquis Calientes”, marcó uno de los mayores escándalos de corrupción de la última gestión provincial y derivó en la condena de la ex ministra. Con la firma del decreto, se concreta su desvinculación definitiva de la administración pública, reforzando la postura del actual gobierno de “tolerancia cero” ante la corrupción.