Río Gallegos superó los 400 casos y el Gobierno analiza un retroceso de fase

Por estas horas, la gobernadora santacruceña Alicia Kirchner mantiene un encuentro en Casa de Gobierno con todo el Gabinete provincial y el Intendente de Río Gallegos, Pablo Grasso, para delinear los pasos a seguir ante el brote de COVID que azota a la capital y enciende las alarmas de las autoridades sanitarias por el riesgo de una mayor expansión del virus. 

El último parte oficial del Ministerio de Salud de la provincia reportó la existencia de 338 casos activos, en su totalidad surgidos en los últimos 15 días, al tiempo que se registró un pico de 49 positivos en 24 horas el día miércoles, y la posibilidad de un sistema de Salud colapsado de mantenerse la tendencia, por la concentración de los mismos en Río Gallegos. 

Por tales motivos, según pudo averiguar La Tecla Patagonia, el Ejecutivo iría hacia un retroceso de fase en la cuarentena, que hasta antes del brote tenía la provincia ubicada dentro del distanciamiento social obligatorio. Específicamente las nuevas restricciones se centrarían en la capital, mientras que habría mayores controles en los ingresos a la ciudad para evitar una propagación hacia otras localidades que hasta hoy no tienen casos.