22 de octubre de 2025
LA OTRA ELECCION
Por sí o por no: Chubut se juega la eliminación de los fueros este domingo
En paralelo a las elecciones nacionales por diputados y provinciales por el Consejo de la Magistratura, los chubutenses también deberán decidir en un referéndum propuesto por el Ejecutivo si eliminan los fueros que hoy protegen a funcionarios y dirigentes sindicales

El próximo domingo 26 de octubre los chubutenses deberán emitir una boleta separada para responder por sí o por no a la reforma propuesta: la pregunta central del plebiscito apunta a la eliminación de los fueros que hoy protegen a funcionarios públicos y a representantes gremiales frente a investigaciones y medidas judiciales. La consulta se realiza en el marco del calendario electoral nacional, por lo que la jornada tendrá una oferta múltiple de votación.
La iniciativa fue impulsada públicamente por el gobernador Ignacio Torres, quien la presentó como una medida para “igualar a todos ante la ley” y para combatir lo que su Gobierno define como prácticas que dificultan la investigación de presuntos hechos de corrupción o irregularidades administrativas. El proyecto avanzó en la Legislatura provincial y terminó traducido en la convocatoria oficial al plebiscito.
En la práctica, la consulta implica una enmienda de la Carta Magna provincial que, si obtuviera la mayoría requerida, modificaría artículos que hoy contemplan inmunidades y procedimientos especiales para funcionarios y ciertos representantes gremiales. Los alcances precisos —qué figuras quedan alcanzadas, qué tipos de protección se eliminan y cómo se instrumentarán las investigaciones— fueron objeto de audiencias y de la elaboración de la papeleta que usarán los electores.
La Secretaría Electoral provincial difundió el diseño definitivo de la papeleta y acordó con los apoderados partidarios la mecánica de votación específica para el plebiscito, que funcionará en paralelo a la Boleta Única de Papel utilizada para las legislativas nacionales. Por ese motivo, además del voto para diputados nacionales y para la nómina provincial al Consejo de la Magistratura, cada elector verá en su sobre una boleta adicional vinculada al referéndum sobre los fueros.
El trámite no estuvo exento de controversia: magistrados y sectores del Poder Judicial cuestionaron en tribunales la convocatoria y plantearon recursos para frenar la consulta, mientras organizaciones sindicales y gremios anunciaron campañas públicas para defender los fueros y explicar por qué consideran que su eliminación podría debilitar la representación y la organización sindical. Esas disputas judiciales y políticas marcaron la campaña de las últimas semanas y llegaron a la agenda pública provincial.
Los argumentos a favor del “sí” insisten en que la eliminación de fueros igualará a todos los ciudadanos ante la Justicia y facilitará las investigaciones por presuntas irregularidades, en especial cuando están involucradas autoridades públicas con potestades relevantes. Por su parte, los defensores del “no” sostienen que los fueros protegen la independencia de poderes y la institucionalidad —y advierten riesgos sobre persecuciones políticas o la vulneración de garantías procesales—, cuestionamientos que alimentaron debates en plazas, radios y redes durante los últimos días.
Desde el punto de vista operativo, la concurrencia del plebiscito con las elecciones nacionales implica un desafío logístico: las autoridades electorales provinciales y nacionales coordinaron mesas, cronogramas y protocolos para evitar confusiones en el cuarto oscuro y para que cada votante pueda emitir sus dos o tres opciones sin solapamientos. La comunicación oficial remarcó que la jornada será administrada con las mismas exigencias de cadena de custodia y fiscalización que rigen para cualquier elección provincial y nacional.
Más allá del resultado —que se conocerá la noche del domingo o en las horas siguientes, según el escrutinio—, el plebiscito dejará una marca política clara: refrendará o rechazará una reforma promovida desde el Ejecutivo provincial que tocó sensibilidades en los tres poderes del Estado y en el movimiento obrero. Para analistas y actores locales, la lectura del voto habrá de considerar la confluencia entre la agenda nacional, la disputa provincial y la percepción ciudadana sobre el funcionamiento de las instituciones en Chubut.
La jornada del 26 de octubre será, por lo tanto, una doble —o triple— contienda: mientras cada ciudadano define sus representantes nacionales, también responderá sobre el modelo de inmunidades que la provincia aplicará a sus autoridades. La coincidencia de calendarios obliga a sumar las lecturas políticas del corto plazo (qué bancada gana espacios en la Cámara de Diputados) con las que repercutirán directamente en la institucionalidad provincial.