Un conflicto extraordinario requiere soluciones extraordinarias

Por Mariano Mansilla *

Hace unos 10 días fui convocado por el Fiscal General, José Gerez, para formar parte de una mesa de mediación que ayudara a encontrar un camino de solución para el conflicto de salud que se inició hace ya dos meses.

Junto al equipo de mediación del Ministerio Público Fiscal, integrado por Cristian Ulf y Cecilia Basterrechea, hicimos nuestro mayor esfuerzo para lograr que el conflicto se resuelva y que los trabajadores puedan volver a hacer lo que mejor saben: cuidar y brindar atención sanitaria a nuestros vecinos y vecinas que necesitan de sus conocimientos específicos.

Sabemos que en este contexto de pandemia los trabajadores de la salud fueron y son un sector imprescindible por lo que requieren de una respuesta lo más pronto posible. Fueron ellos los que durante todo este tiempo pusieron su trabajo y su esfuerzo en pos de la salud de toda nuestra población y ahora son los que requieren de nuestro apoyo.

En conflictos que se desarrollan durante situaciones extraordinarias, como la que atravesamos hace más de 50 días, las soluciones no son sencillas. Requieren de creatividad y de la búsqueda de respuestas que, en otras circunstancias, ni siquiera hubiésemos pensado. Lograr encontrarlas solo es posible con el diálogo. El reclamo incluye sumas remunerativas, así que la convocatoria a los sindicatos con personería gremial resulta indispensable y el acuerdo deberá llegar con el máximo esfuerzo de todas las partes, la mayor empatía y la más grande generosidad.

Apoyar la salud pública no debe ser una simple declaración de deseos. Se debe hacer con acciones concretas que impliquen, entre otras cosas, resolver el pedido de aumento salarial que fue el reclamo que dio inicio al conflicto. Cuánto y cómo lo deberán acordar entre los representantes de los trabajadores y el Gobierno provincial.

Desde nuestro lado como oposición legislativa podemos ayudar, por un lado, a que se encuentren los caminos de diálogo imprescindibles para llegar al acuerdo y, por el otro brindarle al Ejecutivo todas las herramientas que sean necesarias para darle a los trabajadores el reconocimiento que se merecen y a la comunidad la tranquilidad de que la salud está garantizada.

La denominada “segunda ola” de esta pandemia que vino a movilizar los cimientos de nuestras sociedades es ya una realidad. Resolver el conflicto de salud es urgente.

* Vicepresidente Legislatura de Neuquén