La actual administradora del Hospital Regional de Río Gallegos, Andrea Cantín, fue procesada este miércoles por el juez Julián Ercolini, en el marco de la causa que investiga una presunta asociación ilícita en torno a la realización de la obra pública en Santa Cruz, durante los Gobiernos de Cristina Fernández de Kirchner.
La medida fue respaldad por Ercolini, a través en una resolución de 330 hojas, donde el principal acusado es el financista Ernesto Clarens, a quien lo procesaron por el delito de “lavado de activos agravado por resultar miembro de una organización formada para la comisión de hechos de esa naturaleza”, y se le trabó embargo por mil diez millones de pesos.
Además de a Cantín y Clarens, el juez ordenó el procesamiento de otras personas vinculadas a las firmas Austral Construcciones y Gotti SA, ligadas a Lázaro Báez, y de Invernes SA, del financista apuntado. La nómina la completan Carlos Di Gianni, Guido Blondeau, Rafael Mateo Merlini, César Gerardo Andrés, Martín Samuel Jacobs, Emilio Carlos Martín, Sergio Gotti, Armando Ulled, Andrés Kechichian, Héctor Doldi y María Julia Cis.
Andrea, hija del exintendente de Río Gallegos Raúl Cantín, fue nombrada a cargo de la administración del nosocomio capitalino este año, en reemplazo del abogado Andrés Cini. Su nombre cobró notoriedad en agosto de este año, cuando fue incluida por el Gobierno santacruceña en la lista de trabajadores de la salud que cobraron un plus salarial por su labor en la pandemia, pese a desarrollar tareas administrativas.
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