"Yo tengo a mi papá, que no es tan grande, pero está muy enfermo hace mucho tiempo y siempre tiene recaídas. Y está en momentos críticos, entonces me fastidia no poder ir a verlo, por lo menos acompañar a mi mamá. Porque mi papá tiene Alzheimer, no se acuerda de nada. Pero no poder verlo, tocarlo, acariciarlo me fastidia porque sé que en cualquier momento se puede ir. Eso me duele más que fastidia”, contó Ingrid Grudke en una entrevista por Radio Rivadavia. |