Alberto llega a Bariloche con un PJ en plena ebullición

La llegada del presidente Alberto Fernández a la ciudad de San Carlos de Bariloche para asistir al traslado rumbo a Cabo Cañaveral, Florida, Estados Unidos, del satélite argentino de observación SAOCOM 1B, fabricado en el INVAP. Pero más allá del protocolo y la agenda, su arribo, previsto para este viernes alteró los ánimos en el Justicialismo provincial. El Partido, todavía busca recomponerse de la derrota de 2019 y en la ciudad que figura entre las capitales alternativas el panorama no es mejor.

El senador Martín Doñate blanqueó su intención de ser el próximo conductor del PJ, sin embargo muchas voces arengan por distintos medios que el legislador no tiene "base" para alcanzar tal objetivo. Del otro lado hay un sorismo degastado, que busca en María Emilia un aire fresco ante el descontento que hay en la estructura del Partido y por el creciente temor que se intensifique, o al menos continúe con la idea de expulsar militantes y no propiciar la apertura necesaria, que signifique poner un freno de la sintonía que se estaría forjando entre la rosada y la conducción de Juntos Somos Río Negro.

En Bariloche el panorama no es mejor. La ciudad atraviesa un cimbronazo político y financiero que fue consecuencia de un fallo que obliga a la actual administración de Gustavo Gennuso a pagar una suma cercana a los 100 millones de pesos a una empresa de transporte por una gestión realizada durante la intendencia de María Eugenia Martini, actual presidenta del bloque FdT en la Legislatura rionegrina.

En este contexto, los principales referentes peronistas, e involucrados en la causa que promueve el millonario desembolso se llamaron al silencio ante la embestida del intendente de Juntos Somos Río Negro. También está Daniel Natapof, el exconcejal y candidato que no pudo desplazar a Gennuso de la conducción del Centro Cívico. Distintos rumores dan cuenta que estaría recibiendo presiones para dar un paso al costado en la polémica concesión del Cerro Catedral, un tema que también estuvo presente en el diálogo con la gobernadora Arabela Carreras en un reciente encuentro y cuya foto significó un trago amargo para algunos dirigentes.

La llegada  del mandatario nacional quizás pueda servir para aplacar los ánimos y que la tropa del PJ fume la pipa de la paz a pesar de los resquemores que hay en cada sector que compone el universo peronista rionegrino. Bariloche es un enclave político que hoy ostenta Juntos Somos Río Negro, no sólo en la conducción municipal, sino también por ser la cuna de la gobernadora provincial. Quizás como capital alternativa también sea el punto de partida de una nueva concertación que deje a los compañeros y compañeras en segundo plano.