En el presente, el cantante tomó la decisión de revelar su estado porque ya no puede oculatrlo más y al respecto expresó: “Ocultar algo es difícil, nunca te sentís bien. Te sientes culpable. No soy bueno con los secretos. No puedo caminar más con eso. Es como si me estuviera quedando sin excusas”. Por su parte, su esposa Sharon confirmó que en el 2019 debieron suspender una gira internacional por sus problemas pero que ahora Ozzy necesita salir porque fue el único momento en que estuvo encerrado tanto tiempo. Ozzy recordó los síntomas que atraviesa pero no dejan de fortalecerlo: “El dolor es constante. Los primeros seis meses estuve en agonía. Yo decía: ‘Sharon, no me estás diciendo la verdad. Me estoy muriendo, ¿no?’. Pensé que tenía una enfermedad terminal porque la mejora fue muy lenta". En los últimos días de este mes, la pareja viajará rumbo a Suiza para que el artista tome un tratamiento exclusivo para su enfermedad de Parkinson. |